Dragon Suculenta
$8.600
Ver más detalles
Agregar al Carrito
Cargando 
Más información
Directamente del corazón del desierto emerge el Dragón Suculenta, una criatura forjada por la magia antigua y la lealtad. Originalmente plantas espinosas, fueron transformadas en dragones por la poderosa Echinox por proteger sus huevos. Con su piel robusta y cubierta de espinas afiladas, este dragón es un guardián formidable y un superviviente nato de los terrenos más áridos, listo para defender lo que considera suyo.
Sugerencias de uso:
- Puede servir como guardián de un oasis, un tesoro escondido, o como un enemigo formidable adaptado a un entorno hostil.
- Su naturaleza espinosa sugiere mecánicas de combate basadas en defensa o daño de contacto.
Especificaciones del Producto:
- Material: Resina.
- Dimensiones: Aproximadamente 58mm de altura.
- Incluye una base de plástico de regalo para proporcionar mayor estabilidad y seguridad a la miniatura.
Tecnologia Avanzada y Precision:
- Impresa con tecnologia 3D de ultima generación, resalta la textura única de las suculentas y la robustez dracónica. Ideal para pintores que disfrutan de texturas orgánicas y detalles afilados.
Calidad y Durabilidad:
- Hecha con resina de alta calidad, puede soportar el manejo habitual en mesas de juego. Reflejando su origen vegetal robusto, ofrece una buena resistencia a pequeños golpes y caídas accidentales.
"El relato más antiguo registrado sobre el origen del Dragón Suculenta afirma que estos dragones fueron una vez plantas comunes a las que un antiguo dragón conocido como Echinox les dio sensibilidad y forma dracónica. Según el mito, mientras Echinox estaba cargada de huevos, fue perseguida por un dragón no muerto conocido como Mordruth. Este reunió a sus seguidores y persiguió a Echinox hasta un desierto hostil. Buscando refugio Echinox depositó su nidada en un bosque de suculentas con espinas. Al oír a Mordruth y su horda acercarse supo que debía alzar el vuelo para alejarlos de su nido improvisado. Ofreció recompensar a las plantas si protegían a sus crías, y las plantas accedieron. Sabiendo que sus huevos estaban a salva, Echinox pudo regresar y derrotar a Mordruth en batalla. Al regresar al nido de suculentas, Echinox descubrió que las plantas habían crecido hasta convertirse en una cerca viviente, sobre la cual estaban empalados los cuerpos de pumas, serpientes y humanoides. Tras la barrera, sus crías de dragón recién nacidas dormían a salvo, protegidas por las plantas espinosas. Cumpliendo su palabra, la antigua dragona transformó las plantas robustas en los primeros Dragones Suculenta."
¿Buscas un guardián estoico o un adversario formidable adaptado a los climas más duros? El Dragón Suculenta con su historia de lealtad y su apariencia única es el agregado perfecto para tu colección.